Ahora que está empezando el verano y muchos vamos a iniciar las vacaciones, es momento de planificar nuestro equipaje y pensar qué cosas no nos podemos olvidar. Me gustaría daros unos consejos sobre cómo organizar vuestro “Botiquín de Viaje”.
Según el destino elegido para las vacaciones, la confección del botiquín se puede complicar, por lo que, de todos modos, considero importante que visitéis la Farmacia con anterioridad al viaje, para comprobar que no os falte nada de lo esencial. No olvidéis que, en ciertos países, encontrar medicamentos puede convertirse en un auténtico problema. Y, si viajáis a algún país exótico, debéis visitar el Centro de Atención al Viajero para que os aconsejen sobre posibles vacunas o medicamentos específicos que incorporar a vuestro botiquín, según la zona a la que se viaje.
Por mi propia experiencia, sé que al pasar unos días fuera de casa, se cambian las rutinas y los hábitos de vida. Generalmente se come en exceso, además, alimentos que normalmente no incluimos en nuestra dieta habitual. También bebemos más, agua (no siempre embotellada) zumos, refrescos, pero también solemos incrementar el consumo de bebidas alcohólicas. Nos exponemos a cambios de temperatura continuos debido a los aires acondicionados, modificamos nuestros hábitos de sueño y realizamos actividades para las que, a veces, nuestro cuerpo no está preparado.
Todo esto puede ocasionarnos indisposiciones, pudiendo llegar incluso a enfermar durante las vacaciones: enfriamiento, resfriados, fiebre, mareos , diarreas y otros trastornos del aparato digestivo (gases, acidez de estómago, etc.) pueden ser habituales. Pero no por ello vamos a limitar nuestro verano, solo se trata de aplicar cierta precaución y de estar bien preparados para afrontar con tranquilidad los pequeños contratiempos.
Tanto si vuestro destino es la playa como la montaña, ¡cuidado con la exposición
solar! Si no protegéis bien la piel podéis pasar unas horribles vacaciones. Por ello, os recomiendo llevaros un buen protector solar, aplicar el producto media hora antes de salir de casa, e ir repitiendo la aplicación cada dos horas, ya que de lo contrario podemos quemar nuestra piel, y según la intensidad de la quemadura, ver afectadas el resto de nuestras vacaciones. Al terminar la exposición solar hay que hidratarse bien, tanto vía tópica como oral, pues ayuda a disminuir posibles efectos secundarios. Se recomienda 
beber mucha agua al exponerse al sol y evitar el exceso de calor, ya que si no podríamos sufrir procesos de deshidratación.
Pero no todos los males nos pueden venir del sol, ¡no os olvidéis añadir un buen repelente de mosquitos a vuestra maleta! Y algún calmante tópico para las
picaduras que no hayáis podido evitar.
Si vuestra opción es hacer una excursión por la montaña, ¡llevad con vosotros un pequeño botiquín para heridas! Os aconsejo que siempre haya tiritas (Compeed ampollas), por si aparece alguna llaga en los pies. Para evitar que pase, lo mejor es que antes de empezar a caminar os pongáis una buena capa de vaselina, ya que evita las rozaduras y así podréis emprender la marcha al día siguiente sin complicaciones.
Antes de empezar y al finalizar la caminata, conviene hacer unos buenos estiramientos para no lesionarnos y un buen masaje con alcohol de romero para recuperar la musculatura de las piernas.
En resumen, lo que no debería faltar en un botiquín de viaje es lo siguiente:
- Botiquín básico: Antiséptico para heridas(yodo), tiritas resistentes al agua, gasas, vendas, esparadrapo, tijeras y vaselina.
- Agua oxigenada y alcohol 96º.
- Gel antiséptico para las manos.
- Vendas para posibles torceduras, pomada antiinflamatoria.
- Colirios oftalmológicos: Los ojos suelen sufrir en verano más de lo habitual, debido a la continua exposición al sol o al agua de las piscinas. El botiquín debe incluir algún tipo de colirio para evitar enrojecimiento o picor, aunque también se puede optar por usar un suero fisiológico, si bien su acción hidratante es más limitada.
- Pastillas o chicles para evitar los mareos.
- Laxantes.
- Anti-diarreicos.
- Sales de rehidratación oral. (Suero oral).
- Medicación para evitar gases.
- Medicación contra la acidez estomacal.
- Protección solar y loción post solar.
- Repelente de mosquitos y lápiz para picaduras.
- Termómetro.
- Analgésicos y antiinflamatorios: Es probable que durante el viaje se produzcan dolores o molestias generales como el dolor de cabeza o dolor muscular. El remedio básico son los analgésicos y antipiréticos, como el ibuprofeno, el paracetamol o el ácido acetilsalicílico.
- Antialérgicos/Antihistamínicos: Antihistamínicos orales o un corticoide local para alergias, picaduras.
Espero que estos consejos os sirvan de ayuda. ¡Qué tengáis unas buenas vacaciones!
